La vida es difícil. Un camino con constantes obstáculos, baches, piedras y problemas. ¿La solución? Sonrisas. La vida no es vida sin sonrisas. Hay que intentar sonreír. Tan solo intentar sonreír, ver y comprender que tan solo son malas rachas. Que los baches son fáciles de cruzar. Que si te lo propones y tienes cuidado es fácil andar por ese camino que es la vida.

Lucha. Sonríe, vence. Cae, pero vuelve a levantarte.